Una revolución es sangrienta, es hostil y no conoce negociación. Una revolución derriba y destruye todo lo que la obstaculiza. Y ustedes, aquí sentados como lelos, dicen «voy a amar a éstos, no importa lo mucho que me odien». No, ustedes necesitan una revolución. ¿Quién en la vida ha oído hablar de una revolución de tomarse de las manos y cantar «We shall overcome»? No se hace eso en una revolución. No vamos cantando porque estamos ocupados sudando.
Malcolm X