Khruschev comenzó su obra destructiva afirmando que criticaba los errores de Stalin con el fin de "restablecer el leninismo en su pureza original" y mejorar el sistema comunista. Gorbachov hizo las mismas promesas demagógicas para desorientar a la fuerzas de izquierdas. Hoy, debemos rendirnos ante la evidencia: bajo el pretexto de "volver a Lenin", se ha hecho entrar al zarismo; bajo el pretexto de "mejorar el comunismo" se ha resucitado al capitalismo salvaje.
Ludo Martens