En la sociedad burguesa el trabajador está expuesto, desde el nacimiento hasta la muerte, la acción permanente de ideas, sentimientos, hábitos que son beneficiosos para la clase dominante. Esta acción se ejerce a través de incontables canales, y a veces asume formas casi difícil de alcanzar. La iglesia, escuela, arte, prensa, cine, teatro, otras organizaciones, todo lo que es bueno para inculcar en las masas una visión del mundo, una moralidad de las costumbres burguesas.
Mikhail Ivanovich Kalinin