No hemos construido esta sociedad para restringir la libertad personal, sino para que las personas se sientan realmente libres. La hemos construido en gracia a la verdadera libertad personal, a una libertad sin comillas. A mí se me hace difícil imaginarme cuál puede ser la "libertad personal" de un obrero parado que anda muerto de hambre y no encuentra aplicación para su trabajo. La auténtica libertad solo existe allí donde ha sido destruida la explotación, donde no hay opresión de unos hombres por otros, donde no hay paro, ni miseria, donde el hombre no tiembla pensando que puede quedarse mañana sin trabajo, sin techo, sin pan. Solo en una sociedad así puede haber una libertad personal y de todas clases auténtica y no sobre el papel.
Stalin